Frente a la crisis que atraviesa el planeta con la pandemia del COVID-19, el “homeschooling” prosigue desarrollándose como una opción alternativa al homeschooling para la educación de los pequeños, los progenitores eligen por educar en el hogar a sus hijos. Varios desean brindarles a sus hijos una educación religiosa, otros están preocupados por la seguridad, los valores en las academias públicas y otros desean agradar las pretensiones concretas de los pequeños superdotados o con inconvenientes de estudio. Pero la mayor parte de estos progenitores piensan que sus hijos aprenden mejor en un ámbito familiar íntimo, con un currículo que toma presente las fortalezas y pretensiones de los alumnos.
Haydeliz Ramírez Natal, neuroeducadora certificada local y también a nivel internacional en At Home Afterschool, un centro educativo de Arecibo que proporciona este género de programas, notificó que el homeschooling, o homeschooling, donde los progenitores se transforman en profesores de sus hijos, pero en en cualquier caso fuera de las instituciones públicas y privadas. La Constitución de Puerto Rico garantiza este derecho en el Producto 2, Sección 5. Varios progenitores desean hacerse cargo de la educación de sus hijos pero tienen distintas miedos sobre la legalidad, legal o no, de que logren aceptar a sus hijos a las academias del sistema clásico si es requisito. . Es esencial que el padre sepa que puede realizar esto sin inconveniente, tras todo los progenitores son los primeros profesores y en estos procesos del COVID-19 y el regreso a clases que para bastantes no es buena resolución, el padre es muy con la capacidad de educar a su hijo.
Se precisa supervisión con urgencia
Para proseguir con la educación en la vivienda, los USA tienen que necesitar chequeos y visitas regulares (O’Donnell, 2020). Asimismo debe alejarse de un sistema de leyes escalonado que, en ciertos estados, deja a los progenitores regentar academias desde casa sin avisar a las autoridades, sin mandar puntajes de exámenes ni recibir evaluaciones de especialistas sobre el avance de los alumnos (Home School Legal Defense Association, 2022). ). Hasta la actualidad, el progreso de la educación en la vivienda en los USA ha representado una pelea entre la autoridad de los progenitores y la del gobierno. Primeramente, la escuela es un centro para la promoción del niño y debe regularse según el interés superior del niño.
Es primordial ir alén de las apariencias para llegar a una clara descripción de la realidad y, mediante ella, abogar por la optimización de los derechos de la niñez y su protección, aparte de ofrecer resoluciones. En este sentido, Humanium está a la cabeza en el momento de hacer esta misión. En verdad, Humanium sigue apoyando la reflexión sobre temas críticos no revelados que afectan de manera significativa los derechos de los pequeños. Si quiere contribuir a esta causa, considere patrocinar a un niño, llevar a cabo una donación o transformarse en voluntario de nuestra asociación. ¡Actúa en este momento para resguardar y fomentar los derechos de los jóvenes!
Educación en la vivienda vs. desescolarización
Más allá de que la desescolarización se enfoca en la transición de dejar la escuela clásico y también institucionalizada para enfocarse en la “educación en el hogar”, gracias a la situación del COVID-19, es una situación que el 95% de los pequeños y las pequeñas de América Latina y el Caribe experimentan hoy día. Comprender qué es la desescolarización asiste para los progenitores a tener esperanzas realistas sobre de qué manera sus hijos se están amoldando a la educación en la vivienda en frente de esta novedosa situación temporal. Faulconer relata múltiples trucos para hacer más simple la adaptación de las familias a esta situación.
En el momento en que un niño, pequeña o joven sale de la escuela institucionalizada para recibir su educación en la vivienda, famosa como homeschooling, debe pasar por un desarrollo popular en esa red social con el nombre de “desescolarización”. Al revés del procedimiento pedagógico que es la educación en la vivienda, la desescolarización es un periodo en el que el alumno se amolda a su nuevo ambiente y forma de estudiar, lejos de los instructores y estudiantes. Jaqueline Wilson, autora, educadora y asesora sobre el tema, detalla esta etapa como un “periodo de restauración conforme pasa de la escuela pública clásico a otro procedimiento de educación, como la educación en la vivienda”.