Aparte de los perros, otros muchos animales ladran -por lo menos biológicamente comentando- apunta un aparato de biólogos evolutivos de la Facultad de Massachusetts en Amherst, EE.UU. Los científicos han reunido prueba de una pluralidad de estudios para otorgar la primera definición consistente, servible y acústicamente precisa de este sonido animal más habitual de lo que se pensaba previamente. Es verdad que los perros vocalizan de manera diferente a otros animales que asimismo ladran, como pájaros, corzos o monos, pero esa diferencia hay que únicamente a sus diez.000 años de historia compartida con los humanos. Inicialmente, el ladrido canino no era un plan de vocalización que desarrollaron los perros para estar comunicado con nosotros, sino una señal auditiva relacionada con la necesidad de avisar a sus congéneres de la cercanía de un depredador, para lograr lidiar con la situación de forma cooperativa. Esta forma de aviso se puede distinguir en otras especies cuyos sonidos han evolucionado de otra manera y, por consiguiente, hasta la actualidad no se habían relacionado con los ladridos.
¿Por qué razón ladran los perros?
Ciertas etnias de perros tienden a ladrar mucho más que otras. Escucha con atención, transcurrido el tiempo vas a aprender a distinguir los matices de los distintos ladridos de tu perro. E inclusive podrías conocer qué es lo que significa cada ladrido. El paso inicial para supervisar el accionar de tu mascota es comprender por qué razón tu perro ladra.
- Observación/Alarma. Es natural que un perro ladre en el momento en que alguien está en la puerta o en el momento en que un extraño pasa por enfrente de la vivienda o del turismo. Varios perros ladran si sienten alguna amenaza, como diciendo: “Estoy aquí para resguardar este rincón, conque no te misiones conmigo”. El sonido de este ladrido tiende a ser agudo, fuerte y autoritario. Perfeccionar este instinto con capacitación puede contribuir a resguardar su hogar y su familia.
- Ansiedad. Tiende a ser agudo y, en ocasiones, acompañado de gemidos. Este género de ladrido es común en perros con ansiedad por separación, temores y fobias, u otro género de intranquilidades.
- Llamar a la atención.
En el momento en que escuches este ladrido, en la mayoría de los casos vas a saber lo que significa. Esencialmente afirma: “¡Oye! ¡Oye! ¡Mira! ¡Estoy aquí!” Otros perros tienen la posibilidad de lloriquear y ladrar juntos para llamar la atención, prácticamente como el tono de un niño quejumbroso. - Despertar. Esta clase de ladrido es singularmente común en perros chiquitos y perros jóvenes. Varios perros ladran mientras que juegan con personas u otros perros. Tiende a parecer alegre. Ciertos perros ladran de alegría en el momento en que saben que darán un recorrido.
- Contestar a otros perros. Este es bastante familiar. Un perro callejero comienza a ladrar, y uno a la vez se asoma por los balcones o puertas a los que llegan. ¡Suena como una cacofonía!
- Aburrimiento. El ladrido de un perro poco entretenido suena como un perro que ladra solo para percibir su voz. Si bien tiende a ser poco entretenido, asimismo es un tanto triste. Los perros desanimados ladran para dejar en libertad el exceso de energía y, en ocasiones, ladran por soledad. En la mayoría de los casos, precisan mucho más actividad y quizás aun un compañero.
¿Los lobos ladran?
Esto puede escucharse extraño, todos entendemos que los lobos aúllan, pero solamente se ven lobos ladrando. Lo cierto es que, por medio de los ladridos de los lobos, establen contacto con los integrantes de la manada próximos, los emplean para jugar e inclusive para avisar a los integrantes de la manada en el momento en que se están nutriendo.
El aullido es bastante más habitual puesto que se emplea para estar comunicado con integrantes mucho más distantes y con manadas o manadas oponentes. Asimismo se usa para marcar territorio.