La pandemia ha interrumpido prácticamente todos los puntos de la vida como la conocemos. Ha empujado a las industrias a amoldarse, y el ambiente educativo no fué una salvedad. Las instituciones educativas debieron amoldarse de un día para otro a la modalidad de educación virtual. Además de esto, varios progenitores se vieron obligados a asumir el papel de acompañamiento técnico y profesores mientras que los pequeños se quedan en el hogar.
Esta manera ha traído enseñanzas y ocasiones valiosas, pero asimismo ha mostrado las desigualdades en educación y la brecha digital que hay entre personas, comunidades y países.
Los inconvenientes de la educación on line en la pandemia: el trabajo de los enseñantes y la brecha digital
Según Celaá, la educación online en la pandemia fue una contestación instantánea a la urgencia sanitaria actualmente, “pero no forma ni sustituye la educación presencial y la socialización de los inferiores, aparte de producir serios vacíos académicos”. Pero ¿por qué razón no educar? ¿Esta pandemia puso de manifiesto las faltas del sistema educativo, que es en la mayoría de los casos presencial?
En contestación a la primera de las cuestiones, Francisco Mora, doctor en medicina y neurociencias, considera en una entrevista para EDUCACIÓN 3.0 que “nada puede sustituir la raza humana del enseñante en el sala” y ese apego sensible que se crea con y entre los alumnos en un ámbito presencial es verdaderamente bien difícil de conseguir en un desarrollo de estudio a distancia.
Retos para los enseñantes en la enseñanza virtual
Enseñantes y estudiantes familiarizados a un sala y un horario predeterminado, combaten los retos de impartir clases vía en línea. Uno de estos desafíos es la adaptación a las novedosas tecnologías, esto va relacionado a la brecha generacional de los tutores, más allá de que para muchos la utilización de la tecnología es algo habitual (si bien no sean originarios de la tecnología), para otros padecen un cambio extremista. y les cuesta amoldarse a la situación.
Desafíos de la educación en tiempos de pandemia
El gobierno ha establecido la estrategia Aprendo en Casa a fin de que la educación de los alumnos del país no se detenga. Desde este momento se prioriza la educación dependiendo del autocuidado en frente de la pandemia, todo lo que este relacionado a ciudadanía, compromiso y también involucramiento en frente de esta situación.
Para los enseñantes los desafíos de la educación virtual en tiempos de pandemia son varios, esto ha implicado para ellos el cambio de espacio de avance que era el sala: presencial y vivencial. El formato de estudio virtual o a distancia, por otra parte, fue desarrollado para mayores. Entonces, el primer desafío fue salir de la escuela y después está el enorme desafío de la tecnología. No todos y cada uno de los instructores tienen correo, Internet o una PC portátil en el hogar. El reto era enfrentar todo lo mencionado en escaso tiempo, hallar entrar en contacto con los estudiantes y las familias. Cerca del 98% de los enseñantes del país establen contacto con los progenitores mediante WhatsApp.
No para todos y cada uno de los alumnos.
Naturalmente, la educación virtual semeja algo simple por la elasticidad que da y la tranquilidad de estudiar cualquier ocasión y desde cualquier sitio. No obstante, no todos y cada uno de los alumnos tienen la posibilidad de tomar sus tutoriales on-line. Tomar un curso on line necesita mucha especialidad y también idea.
Cada estudiante o sus progenitores tienen que desarrollar un programa y cumplirlo. Los alumnos que carecen de estas capacidades tienen la posibilidad de no tener éxito en las clases virtuales. Además de esto, a ciertos alumnos sencillamente no les agrada estudiar on-line. eligen la experiencia del salón de clases.