Las comunidades se identifican por una secuencia de peculiaridades que las identifican:
- Identidad. Los integrantes de una red social distribuyen intereses, deseos u objetivos recurrentes. Esto le entrega a la red social una sucesión de aspectos propios y especificaciones que edifican su identidad.
- Propósito común. Los integrantes de una red social tienen objetivos y misiones a lograr, y todos trabajan hacia el logro de los objetivos propuestos.
- Deber. El deber pertence a los valores clave en una red social. Entre sus integrantes se crean vínculos que dejan la armonía y la búsqueda de un fin común.
- Cultura. Los integrantes distribuyen valores recurrentes (que determinan lo que está tolerado y lo que no está en la red social), prácticas, una visión común de todo el mundo y una crianza que transmite las peculiaridades de la red social de generación en generación.
- Interacción. Los integrantes de una red social interaccionan entre sí. Por su parte, pertenecen a una sociedad mayor que los tiene dentro y por consiguiente asimismo interaccionan con otros conjuntos sociales.
- Dinámico. Las comunidades son construcciones activas y en incesante cambio.
¿Qué es la civilización organizacional?
La civilización organizacional se comprende como las opiniones, valores, hábitos, tradiciones, reacciones y vivencias de una organización. El propósito de la civilización organizacional es precisar de qué manera se estima que los integrantes interaccionen entre sí y con el planeta exterior.
La civilización organizacional no es sencillamente la suma de la gente que trabajan en una cierta organización o compañía. Por contra, la civilización organizacional es previo a las etnias particulares: toda cultura organizacional primero forma sus bases para entonces amoldar el plantel (usados) que formarán esa cultura organizacional.
¿Qué es la civilización?
La civilización es el grupo de elementos y especificaciones de una cierta red social humana. Incluye puntos como prácticas, tradiciones, reglas y de qué manera un conjunto se piensa a sí mismo, se comunica y edifica una sociedad.
La palabra “cultivo” es un término extenso que procede de la palabra latina cultus, por su parte derivada de colere, que significa “proteger el campo y el ganado”, lo que el día de hoy se conoce como “cultivar” . “. El pensador de roma Cicerón (siglo I a. C.) usó el término cultura animi (“cultivar la cabeza”) para referirse en sentido figurado al trabajo de llevar a cabo florecer la sabiduría humana.